Radiografía de una juventud precarizada: UATAE reivindica en el Día Internacional de la Juventud el autoempleo con derechos y protección social

  • Las y los autónomos jóvenes de hasta 30 años representan el 6,2% del colectivo, que crece únicamente un 0’8% con respecto al año anterior, frente al 15,9% de esa franja de edad en el trabajo asalariado
  • El desempleo entre las y los menores de 25 años sigue siendo una de las asignaturas pendientes a resolver que se sitúa en un 37,1% con un salario medio general de 20.566 euros
  • La pobreza o riesgo de exclusión condiciona al 30% de los jóvenes, que además tiene que lidiar con las subidas de los alquileres, lo que demora la edad media de emancipación a los 29,5 años siendo la edad media de emancipación en la UE-27 de 26,2 años
  • Landaburu: “el autoempleo debe configurarse como una alternativa real que garantice la protección de las y los jóvenes y que sirva como modelo estratégico para afrontar el reto de la España Vaciada y de la transición ecológica”.

Madrid, 12 de agosto de 2021

En el día de hoy, 12 de agosto, se celebra el Día Internacional de la Juventud, un año más, desde la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE) y junto a la organización juvenil integrada en UATAE, la Unión de Asociaciones de Jóvenes Autónomos y Emprendedores (UJAE), recuerdan la necesidad de “revertir la situación de precariedad y desprotección que se consolida en el conjunto del colectivo y que se ha visto agravada en los menores de treinta años”, sobre todo, en este último periodo marcado por las limitaciones en la actividad económica propiciadas por la crisis sanitaria derivada de la pandemia. Los datos son claros, dentro del conjunto de los trabajadores y trabajadoras por cuenta propia, los menores de treinta años ocupan un porcentaje muy pequeño (6,2%), pese al ligero ascenso con respecto al año pasado (5,4%), el porcentaje sigue siendo casi tres veces menor que el que ocupa la juventud dentro del trabajo asalariado (15,9%).

Las cifras aportadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) con respecto a la Encuesta de Población Activa (EPA) del último trimestre deja entrever que el empleo autónomo no termina de consolidarse como alternativa frente al empleo asalariado, lo que refleja un año más que las bondades que rodean el discurso oficial sobre el emprendimiento no termina de canalizar en una juventud que echa en falta, como apuntan desde UJAE, “medidas efectivas y planes de actuación que permitan dignificar el autoempleo entre las y los jóvenes”. Junto a estos datos aportados se suma el de la alarmante brecha de género existente: el 60,59% de los trabajadores por cuenta propia menores de treinta años son varones, frente al 39,40% de mujeres. “Hay que apostar por un plan de actuación inmediato que implique políticas que permitan, por un lado, eliminar la actual brecha de género y que ayuden a consolidar la visión de que el autoempleo en los jóvenes puede configurarse como una alternativa de inserción laboral y desarrollo profesional” señala María José Landaburu, secretaria general de UATAE, que además, incide en afrontar este reto desde, “la protección social, garantizando los derechos de las y los jóvenes autónomos, para que no sean usados finalmente como tapadera legal de algunas empresas que a través de la fórmula fraudulenta de falsos autónomos operan para no reconocer la relación laboral existente entre empresa y trabajador”.

En este sentido, UATAE y UJAE, han elaborado una serie de propuestas que serán aportadas a las distintas formaciones políticas y que van encaminadas a mejorar la situación actual del colectivo. Entre las que destacan; la ampliación y mejora de las prestaciones sociales, mejorando el acompañamiento público al emprendimiento joven con el acceso a la financiación, la creación de un ‘Banco de Ideas’ público que analice y apoye con crédito y liquidez a aquellos proyectos protagonizados por personas jóvenes que aporten valor social, medioambiental o cultural. Igualmente, desde la organización apuestan por establecer mecanismos a través de la implantación de una “cuota-joven de cotización”, que haga compatible el trabajo autónomo joven con los estudios y la formación, con un límite de edad e ingresos, para permitir emprender una actividad parcial por cuenta propia sin renunciar a completar o ampliar la formación. “Caminar en esta dirección permitirá apostar por la consolidación de la recuperación económica que empezamos a ver y a trabajar en la reconstrucción de un nuevo modelo más justo, donde la voz de las y los jóvenes ocupe un papel principal” en el que puedan “aportar soluciones que respondan a las necesidades y problemáticas concretas que se presentan a corto y largo plazo”, concluye Landaburu.