La prestación extraordinaria ya es una realidad: una conquista histórica de los autónomos que tiene un alcance todavía insuficiente

Hoy 780.000 trabajadores autónomos cobran la prestación extraordinaria por cese de actividad vinculado a la crisis económica provocada por el Covid-19 y el estado de alarma: para 1 de cada 4 autónomos en España será ya efectiva esta protección. Desde la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE) creemos que es una cifra todavía insuficiente, para la que venimos reclamando menos burocracia y nuevas medidas para multiplicar su alcance, pero que se trata de una conquista histórica. No olvidamos cómo la crisis financiera de 2008 truncó tantos proyectos profesionales y vitales de muchos y muchas trabajadoras por cuenta propia, sin que gobiernos de diferente signo político hiciera una apuesta por mejorar su red de protección social. Nadie nos ha regalado nada. Muy al contrario, los últimos años – desde la reforma laboral de 2012 y las políticas de severos recortes sociales- el trabajo autónomo ha venido creciendo como alternativa precaria a la expulsión que mucha gente ha sufrido del mercado de trabajo. Vivimos una situación estructura de desprotección que ha quedado al descubierto con esta crisis.

Por eso, desde UATAE saludamos que el 97% de solicitudes resueltas hasta la fecha hayan sido favorables. Se trata de autónomos que ya tienen prestación, y que no tendrán que pagar cuota durante el tiempo en que la reciban, y a los que además se devolverá la parte de la cuota de marzo correspondiente a los días en los que su situación ya estuviera afectada por la crisis del Covid-19. A fecha de 14 de abril ya había presentadas más de 950.000, por lo que el escudo social se va ampliando y llegando a muchos autónomos que lo necesitan y sus familias. Sin embargo, como venimos diciendo, el gobierno puede y debe hacer más:

  • Hay 200.000 solicitudes sin respuesta, y el número de solicitudes va a seguir creciendo -solo con los requisitos actuales, el propio ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones prevé que se llegue a 1.400.000 en total-. Las instrucciones a las mutuas para la agilización de procedimientos deben ser claras y la propia maquinaria de la administración debe estar al servicio de dar respuesta a las necesidades que esta prioridad exija.
  • El umbral del 75% de pérdidas para acceder a la prestación con exoneración de cuotas deja fuera a muchos autónomos con pocos ingresos, para los que habría que llegar a rebajar ese umbral a un 40% de pérdidas dentro de una lógica progresiva.
  • La moratoria de la cuota a la Seguridad Social planteada para quienes no estén disfrutando de la prestación debe ser efectiva desde abril, sin más dilaciones. Nadie entendería que se insistiese en el error del mes pasado.
  • Es imprescindible garantizar que esta prestación también llega a los 400.000 autónomos sin mutua colaboradora de la Seguridad Social asignada, que han estado pagando sus cotizaciones religiosamente.
  • Calculamos en 20.000 los autónomos de temporada que se han quedado sin posibilidad de trabajar ante la interrupción de la campaña turística de primavera-verano de este año, y a los que esta crisis sobrevenida sorprendió sin estar todavía dados de alta como autónomos este año. Para ellos también hay que buscar una solución de acceso a la prestación, como se ha hecho con otro tipo de ayudas para los trabajadores asalariados fijos discontinuos.
  • La normativa aprobada no excluye expresamente de la prestación extraordinaria a quienes estaban de alta el 14 de marzo y se dieron de baja días después, pero nos consta que las mutuas están poniendo trabas: urge que se clarifique con la instrucción pertinente que deben tener acceso.

Y, por supuesto, la protección no acaba con la prestación extraordinaria, y es más necesario que antes que se sigan tomando medidas que amplíen la protección de los y las trabajadoras por cuenta propia:

  • Asegurando que los préstamos con avales públicos de la línea de financiación del Instituto de Crédito Oficial (ICO) llegue a autónomos y pymes sin dilaciones ni abusos de los bancos. Es necesario transparencia y diligencia para que la liquidez llegue al tejido productivo en condiciones justas.
  • Impulsando cuanto antes ayudas y moratorias para alquileres de nuestros locales y oficinas y otros gastos asociados a la actividad, como la inversión en vehículos, maquinaria o licencias.

Seguimos caminando.